Tipos de galaxias

Una galaxia se ve siempre, en telescopios de aficionados, como una mancha difusa (de ahí, que durante mucho tiempo, se las confundiera con nebulosas) pero dotada con una luz especial, chispeante y llena de misterio. Casi todas nos presentan un aspecto alargado, aunque hay algunas que parecen casi circulares.


Una entre millones

Hasta comienzos del siglo xx se creía que nuestra Galaxia, con sus inmensas dimensiones y la incalculable cantidad de astros que en ella se encierra, era el Universo. Las magnitudes de su ámbito, que progresivamente iban conociéndose, bastaban para colmar la imaginación de los astrónomos , y parecía impensable que pudiera existir algo más allá de ella, hasta que los astrónomos empezaron a estudiar con especial cuidado un tipo especial de nebulosas en espiral.


Halos del Sol y la Luna

A veces miras hacia arriba durante un día claro o una noche despejada y ves un enorme círculo de luz alrededor del Sol o la Luna. Los científicos suelen llamar a este anillo o círculo un halo. Recibimos muchos mensajes durante el año de personas que acaban de ver un anillo alrededor del Sol o la Luna. Los halos solares y lunares son bastante comunes, pero tienen un aspecto tan misterioso que la gente a menudo se siente maravillada al verlos. Quieren saber: ¿qué ocasiona un halo alrededor del Sol o la Luna?


Asteroides y meteoritos: pequeños planetas

Al referirnos a la estructura del Sistema Solar, aludimos a la llamada ley de Bode, que establece la existencia de cierta proporción entre las distancias de cada planeta respecto del Sol. Efectivamente, un planeta dista del Sol casi el doble que el anterior. De acuerdo con este esquema, los astrónomos encontraron un hueco entre Marte y Júpiter. Para que la ley se cumpliera, tenía que existir un planeta a casi el doble de distancia del Sol que Marte, y este planeta no era visible.


Urano y Neptuno

Urano y Neptuno no son observables a simple vista a causa de su gran lejanía. Fueron descubiertos telescopicamente: Urano, en 1.781, por Herschel; Neptuno, en 1.846, por Galle (sobre cálculos de Le Verrier.
Urano y Neptuno son dos planetas jovianos, no tan enormes como Júpiter y Saturno, pero de todas formas gigantes, de unos 50.000 kilómetros de diámetro.Giran también rápidamente sobre su eje (en diecisiete y dieciséis horas respectivamente) y están envueltos en enormes capas atmosféricas en las que abundan el hidrógeno, helio y metano. Se experimentan grandes tempestades en su seno (sobre todo en Neptuno), pero no resulta fácil observarlas con nuestros instrumentos.